En este apartado quiero recoger mi conclusión final del trabajo realizado.
En primer lugar quiero destacar que he puesto los temas que más curiosidad me han dado, ya sea de la asignatura de Educación y Sociedad, como cualquier otro tema relacionado con la educación que yo creyera que merecía una reflexión por mi parte.
en segundo lugar, quiero decir que he redactado todo desde mi opinión personal y mis propias experiencias.
Y por último, considero conveniente explicar para qué me ha servido este blog.
Me ha servido para buscar información acerca de muchos de los temas abordados, así como para hacer una reflexión crítica acerca de los mismos. También, me ha servido para aprender muchos contenidos y afianzar mis conocimientos de la asignatura de Educación y sociedad.
De igual modo, creo que gracias a este blog he sabido organizar mucho mejor mis pensamientos acerca de los temas expuestos, y obtener mucha curiosidad y ganas de seguir buscando temas sobre los que escribir.
Por último, destacar que ha sido una herramienta muy útil en el transcurso del cuatrimestre, la cual, como ya he dicho, me ha servido de mucha ayuda tanto a nivel académico como personal.
Normalmente, en los colegios se sigue la tradición de realizar un regalo para el día de la madre o padre, y entregárselo a los mismos ese día, pero, ¿qué ocurre si un niño no tiene padre/madre?
Tales días estos niños pueden sentirse raros, o puede desencadenar en ellos ciertos sentimientos al no entender porqué ellos no pueden hacer lo mismo que el resto.
Es por esto, que barios centros educativos han eliminado de su calendario el día de la madre y día del padre para convertirlo en un sólo día: El día internacional de las familias.
Esto ocurre debido a que las familias han cambiado mucho en los últimos años, y no existe únicamente un modelo familiar de padre, madre e hijos, si no que las posibilidades se extienden, por ejemplo, padres y madres solteros, divorciados, padres y madres homosexuales, y un largo etcétera. Por lo tanto, se deben cambiar nuestras tradiciones y amoldarnos un poco a los cambios que van ocurriendo en nuestro país.
En mi opinión, es una idea muy buena, pero quiero destacar los siguientes puntos:
A mi parecer, si la mayoría de niños en nuestra clase sigue siendo "tradicional" (es decir, un padre y una madre) no considero oportuno cambiar esta festividad, pues no supondría un mayor problema para nuestros alumnos, y considero unos días bonitos para compartir en familia, y además que a los padres y a las madres les suele hacer mucha ilusión.
Por el contrario, de estar en una clase con varios modelos de familia en las que quizás estas festividades no encajan del todo bien, si que consideraría oportuno establecer el día de las familias, pues puede venirnos mucho mejor en estos casos.
En conclusión, creo que es una muy buena iniciativa, y considerando que con el paso de los años seguramente cambien aún más los modelos familiares, sí que se debería instaurar el día internacional de las familias.
En esta entrada anterior ya hablé de las llamadas asignaturas "de relleno", pero, ¿Qué pasa con las asignaturas que nos apasionan?
A lo largo de mi vida, tanto en colegio, instituto y universidad, he encontrado asignaturas que me gustaban más que otras, que destacaban, que les dedicaba más tiempo, que estudiaba casi sin esfuerzo.
Pero muchas de estas asignaturas las recuerdo en parte por su profesor/a, lo que me hace plantearme la siguiente pregunta:
¿Me gustaba la asignatura, o es que el profesor era muy bueno?
Como bien sabemos, un buen profesor tiene que buscar la motivación de sus alumnos, incitar su curiosidad por la asignatura, etc. Y eso mismo pasaba conmigo, aparte de que las asignaturas me gustasen muchísimo, me topé con profesores y profesoras expertos, tanto en su trabajo como en la materia a abordar.
También, cabe destacar que ha habido algunas asignaturas durante mi etapa estudiantil que me han gustado mucho, normalmente por su contenido, aunque el profesor no fuera especialmente bueno en ello.
Las asignaturas que más curiosidad despertaban en mi eran aquellas que invitaban a la reflexión, que podías descubrir día tras día sin aburrirte, omitiendo por supuesto las (para mi) odiadas asignaturas monótonas.
De igual modo, quiero decir, que al menos en mi caso, estas asignaturas fueron en las que mayor nota conseguí pues como he comentado me interesaba y me esforzaba más, viéndose eso reflejado, por lo tanto, en los resultados.
Personalmente, lo que quiero conseguir con mi futuro trabajo es, no solo ser una profesora recordada como ya comenté, sino que las clases que imparta sean especiales para mis alumnos, logre levantar en ellos esa curiosidad y esa motivación y sepa que mi trabajo, simplemente con esto, está conseguido.
Es cierto, que en la etapa infantil esto no es tan sencillo, pues estamos ante niños muy pequeños que normalmente suelen prestar atención y como sabemos, suelen tener una gran admiración por su maestro/a. Pero de igual modo, se que muchas veces los alumnos de infantil no "quieren" de igual manera a unos maestros que a otros, y quisiera levantar en ellos eso, que cuando fueran adolescentes o adultos, al echar la vista atrás me recordasen con todo el cariño con el que seguramente les recordaré yo a ellos.
Cuando se estudian las familias en la sociedad actual; debemos entender que hay distintos tipos de familias, y por lo tanto diferentes tipos de convivencia. Otra característica que tenemos que considerar en el estudio de las familias, son por ejemplo, es la influencia de los cambios sociodemográficos en las familias.
Un acontecimiento que cabe destacar que relaciona el desarrollo económico con el nivel familiar es, la incorporación de las mujeres al mercado laboral, por lo tanto ya no sólo se deben al trabajo doméstico de la casa. Por lo tanto las mujeres cuenta ya también con un nivel educativo mayor. También esto a supuesto un cambio significativo en las familias y, de igual modo en la sociedad. Esto, para algunos supone también un problema, porque resulta más difícil tanto tener hijos, como cuidarlos después.
Aún que las mujeres se hayan incorporado al trabajo, no podemos hablar todavía de igualdad laboral de hombres y mujeres. España, junto con Italia y Grecia, presentan las más bajas tasas de actividad de las mujeres.
También en el interior de las familias, podemos darnos cuenta de que el trabajo doméstico se reparte entre el hombre y la mujer. Incluso los hijos e hijas suelen ayudar en las tareas tempranamente
¿Cómo abordar esto en el aula?
Le trataríamos de explicar a nuestros alumnos que no hay diferencias entre hombres y mujeres. Que muchas de nuestras madres ya trabajan y se dedican (igual que los padres) a trabajar para ganar dinero y poder darnos lo mejor, dentro de nuestras posibilidades.
Les explicaremos que, hace unos años, las mujeres no podían trabajar y que, debían dedicarse a tiempo completo a cuidar la casa, limpiar, etc.
También, que a muchas mujeres se les trataba mal por el simple hecho de ser mujer, que no contaban con derechos como por ejemplo, votar, o poder elegir y decidir. Las mujeres debían estar calladas y consentir lo que les viniera.
Pero que, gracias a muchas protestas y a luchas por nuestros derechos hemos conseguido con el paso de los años que se nos valore como personas y que, en la medida de lo posible se nos trate con el mismo respeto, y con los mismos derechos que a los hombres.
Les explicaríamos a los niños, por lo tanto, que si algo no nos gusta o si pensamos que en nuestro país hay algunas cosas mal y, que está en nuestra mano poder cambiarlas debemos luchar por ello.
Y como padres, ¿Qué podemos hacer?
Debemos intentar no caer en el sexismo, y explicarles desde pequeños que no existen cosas "de niño y de niña" que son cosas para niños en general.
Por ejemplo, no decirle a nuestro hijo que no se vista de rosa porque "es de niña" si no proporcionarle la libertad de que elija los colores con los que quiere vestirse en la medida de lo posible.
De igual modo, explicarle tanto a los hijos como a las hijas que pueden decidir sin problemas la profesión que quieran tener en el futuro.
Que no hay distinciones entre hombre y mujeres, y que todos somos iguales y merecemos lo mismo.
Hace tiempo, buscando vídeos sobre entrevistas a niños, me topé con el siguiente:
Es un vídeo que dura 10 minutos, pero que vale completamente la pena ver, y que no dejará a nadie indiferente.
Me llamó especialmente la atención la naturalidad de estos niños y lo bien integrado que tienen en su vida las "explicaciones" que tienen que dar, lo normal que es su familia y los distintos tipos de familia que existen en el mundo.
Realmente, no esperaba estas respuestas. Quizás esperaba alguna mala experiencia, por ejemplo con compañeros de clase que no entendieran o que no respetaran a su familia, pero no, nada en absoluto. Y es sorprendente para bien, pues poco a poco vamos en el camino correcto.
Yo, en mi futura clase, quiero esto. Compañeros que se entienden y respetan entre sí, que entiendan todos los modelos de familia, que todos son válidos, que todos existen, que todos se quieren.
Elaborando entradas anteriores, llegué a la conclusión de como recuerdo yo a mis profesores de colegio e instituto, y a quienes recuerdo con más cariño que a otros.
En primer lugar y empezando por lo peor, recuero a los "malos" profesores, aquellos que gritaban y humillaban a los alumnos (siguen existiendo) a los que literalmente no daban clase, o a los que ponían el listón demasiado alto en lo que respecta a sus exámenes, trabajos, etc.
Esto sería el claro ejemplo de lo que hay que evitar, pues no queremos que los alumnos nos recuerden así o que ni siquiera nos recuerden.
En segundo lugar, recuerdo a aquellos profesores realmente implicados en su materia, dedicando todo el tiempo posible y necesario para que obtuviésemos el mayor rendimiento, sin importar cuantas veces tuvieran que explicar algo, ni cuantos ejercicios distintos idear. Asimismo, aparte de su materia, se interesaban por nuestro rendiemiento en el resto de asignaturas, por nuestros problemas personales, nuestro grado de estrés en los exámenes y nos ayudaban en todo esto.
Incluso recuerdo a "buenos" profesores ayudándome con las materias de los "malos", es decir, dándome apuntes que no les correspondía, dedicando tiempo a algo que no es su materia, simplemente por ayudarme porque yo pudiera salir de allí habiendo aprobado, y ellos satisfechos por haber realizado mucho más de lo que les correspondía.
Yo, sinceramente quiero ser uno de estos últimos. Dedicar tiempo y esfuerzo a mis alumnos, a resolver problemas, a trabajar y trabajar en la materia, a conseguir el máximo rendimiento sin que esto impida el aburrimiento de los niños.
Quiero ser su referencia.
Su punto de apoyo.
Su lugar donde buscar ayuda.
Su consulta.
Quiero que mis futuros alumnos aprendan divirtiéndose, lograr que se interesen por lo que estamos haciendo, que crezcan y que sueñen con que todo, absolutamente, con esfuerzo y constancia puede hacerse realidad.
En primer lugar, podemos definir la transexualidad como: persona cuya
identidad de género no coincida con la identidad sexual que se le
atribuye a partir de criterios biológicos. Las personas transexuales no
siempre desean modificar las características sexuales externas que no se
corresponden con el género con el que se sienten identificadas, pero
otras sí. Esta inconformidad lleva a estas personas a intentar adecuar
su cuerpo con el género autopercibido y a vivir y ser aceptadas como
personas del género opuesto. La adecuación del cuerpo supone pasar por
una terapia de reemplazo hormonal e incluso quirúrgica. El objetivo
final es adecuar su forma de vida y relaciones sociales, además de su
apariencia física mediante cambios anatómicos, es decir, adecuar su
cuerpo al sexo sentido o identidad de género.
Ahora bien, ¿Qué le ocurre a una persona transexual en la escuela?
Puede ser que los compañeros hayan recibido una explicación sobre la posibilidad de que esto ocurra, ya sea en casa o en la escuela, siendo por lo tanto mucho más fácil su aceptación y entendimiento de tal suceso. La persona transexual no necesitará dar muchas explicaciones si sufre algún cambio físico, si se cambia el nombre o si actúa de otra manera distinta a la habitual.
Pero, por el contrario podríamos estar ante un colegio en el cual esto no se ha explicado, no se entiende y no se respeta, momento en el cual la persona transexual deberá justificarse mucho más y, de hecho, se pasará gran parte de su escolaridad dando explicaciones. De igual modo, si los compañeros no respetan este suceso, podrían darse casos de bullying, humillaciones, burlas y un largo etcétera.
¿Qué debemos hacer para evitarlo?
A mi parecer, primero habría que explicar que estas cosas existen y no tratarlo como un tema tabú del cual no se sabe, no se habla y no se trata.
En segundo lugar, de existir un caso o varios en el aula, deberíamos tratarlo con total normalidad, pues así lo es, y en el caso de ser necesario establecer una explicación clara y concisa a nuestros alumnos, sin olvidarnos nunca de lo más importante: el respeto entre personas.
Aún así, pueden existir padres que no les guste que se traten estos temas o incluso que algún niño/a transexual este en la misma clase que su hijo, de igual modo que puede haber niños que no entiendan tal suceso. Si esto apareciera, considero fundamental realizar algún tipo de taller con padres y alumnos, e incluso invitar a alguna asociación a que nos hable sobre el tema. Creo que así se conseguiría eliminar muchos de estos pensamientos tanto en adultos como en niños.
Aún así, quiero destacar que no se puede lograr que todos los padres tengan este entendimiento del tema, pues hay algunos que simplemente no apoyan, comparten, entienden ni respetan este tema. Ante tal caso, los profesores deberían indicar, que en la medida de lo posible intenten inculcarle a sus hijos al menos, la idea del respeto.
Aquí os dejo un vídeo de una entrevista a una niña transexual, que invita a la reflexión: